Hotel Monasterio San Miguel

Sitio muy céntrico, muy cerca de restaurantes y sitios de interés que hay que visitar obligadamente. Las habitaciones limpias, buena atención de todo el personal y muy tranquilo.

Agradable y tranquilo, habitación amplia y cama supercomoda.

Es la segunda vez que estábamos, la primera fue hace 10 años, en esta ocasión pagamos por adelantado por tener mejor precio, pero el día antes, en la misma página del hotel costaba 100€ menos incluyendo el desayuno y parking, me quedé perplejo. En esta ocasión, la habitación tenía a su izquierda una azotea llena de aparatos de aire acondicionado con ruido continuo durante toda la noche, y desde las 8 de la mañana ruidos notables con el cuarto de Camareras que había a la derecha de la habitación, por lo que poco descanso, amén de que las Camareras hablaban a voces desde primera hora de la mañana. El resto del hotel tiene su encanto, aunque las habitaciones estándares necesitan una reforma de decoración, tienen aspecto viejuno, agradecer sin duda al recepcionasta de las noches que tenia empatía cero con los clientes, una pena, porque el resto de recepcionistas muy bien.

Hotel grande, con piscina, recepcionistas muy amables y atentos, difícil aparcar por la zona porque estaba todo en obras y no sabes donde puedes dejar el coche y donde no, la piscina está muy bien, muy tranquila por las mañanas, no probamos el desayuno buffet pero si desayuno normal en la cafetería y merienda y muy bien. Frío en las habitaciones, limpiadoras muy ruidosas, desde por la mañana temprano con las aspiradoras haciendo bastante ruido, una de ellas entró en nuestra habitación estando nosotros dentro acostados, siendo sábado de vacaciones a las 9:45...Para ir a la playa cogimos el coche todos los días, el centro si está cerca andando.

Hotel con mucho encanto, lo único que estaban de obras en las calles aledañas, por lo demás muy bien.

Bello hotel, bien situado, cómodo y con empleados atentos y amables.

Buen hotel, precioso edificio bien mantenido, buen servicio en recepción, pisos y cafetería.

Precioso y céntrico hotel, muy parecido a un parador por sus características. Muy buen trato personal y confortables habitaciones.

Precioso hotel. Pero habitaciones propias de un tres estrellas.

Todo muy bueno, sitio bonito y atención inmediata y buena.

Hotel muy bien situado, preciosas instalaciones, habitaciones amplias, buen servicio.

Me ha gustado, ya he estado en varias ocasiones.

La habitación enorme, y en buenas condiciones. Limpieza muy correcta. El personal de hotel es muy amable. El puerto de Santa María no es muy grande, pero está bien situado. El hotel es un antiguo monasterio reformado. Tiene mucho encanto. Muy recomendable.

En general, la estancia ha sido muy positiva, aunque solo estuvimos 2 días. Nos tocó una suite con cama de matrimonio, era muy bonita, parecía un apartamento. El cuarto de baño era muy grande, totalmente restaurado y moderno, la cama era cómoda, la única pega era que escuchábamos el ruido del tren en el cabecero de la cama, pero solo pasaba de vez en cuando, también sonaba mucho el somier cuando te movías, aunque solo fuera mínimamente. La pareja que venía con nosotros, ocupó otra suite, pero con 2 camas, muy cómodas, e igual de grande que mi habitación, lo malo a destacar es el mal olor a tuberías que tenía su habitación, nada más abrir la puerta, se notaba un olor como a rancio y después a tuberías. Las zonas comunes son muy bonitas, luminosas y con plantas, lo único que, para dar con las habitaciones, es un laberinto con muchos pasillos, aunque bien señalizados. El desayuno es espectacular, tipo buffet, pero de calidad, el café buenísimo, es raro que esté tan bueno en los hoteles, pero aquí estaba exquisito, tiene mucha variedad, cereales, fruta, embutidos, huevos, pastelería, pan... Tiene piscina, es pequeñita, y hay pocas hamacas, pero está en un sitio con muchas plantas y muy acogedor. El servicio muy amable y servicial. Por lo demás, es un hotel que está muy céntrico, íbamos andando a todos sitios, la zona de comidas estaba muy cerca y también algunos pubs que estaban muy bien. Por supuesto que volvería, aunque tendría cuidado de que me dieran una habitación sin mal olor, es lo único negativo.

Todo muy bien y el trato excelente.

La habitacion y el hotel son maravillosos, pero el descanso fue una pesadilla. El colchon estaba viejo, los muelles rechinaban y ademas se clavaban en la espalda. El resultado de la experiencia en el hotel monasterio fúe un dia entero tomando relajantes musculares, calor seco y reposo. Es una pena que un hotel tan prestigioso como el monasterio y con tan buena presencia nos halla dejado tan mal sabor de boca, o mejor dicho, de espalda. Pero bueno lo tendremos en cuenta para no volver a visitarlo mas.

Muy agradable y acogedor. Buen servicio y mucha tranquilidad.

La estancia ha sido muy agradable, lass instalaciones adecuadas y el desayuno estupendo.

Nos gustó mucho el hotel. La ubicación genial en el centro del pueblo. Eso si está difícil encontrar aparcamientos. El hotel tiene un encanto especial.

Genial.