Perfecto hotel para una escapada a Valladolid. Decoración clásica muy cuidada y con buen gusto. Todo muy limpio. Sábanas y toallas de buena calidad. Habitación amplia. Tenía incluso ordenador. Lo único que yo pedí altura y vistas y me pusieron a un patio habitación 109. No tomé desayuno con lo cual no puedo opinar. Buen servicio en recepción. Inmejorable ubicación. Repetiría sin dudas. Llegué antes de las once de la mañana y ya me ubicaron en la habitación.
Estancia no hotel: Maio 2016