El hotel está reformado al menos la habitación donde hemos estado estaba completamente renovada. Disponía de un balcón enorme, aunque la única pega es que da al patio de un colegio, con lo cual supongo que se oirá bastante ruido cuando los niños anden jugando. Nosotros los oímos un rato jugar al futbol, y al ser por la tarde, pues se entiende que molestan menos. La limpieza es impecable, el personal te atiende de maravilla, en el buffet del desayuno no falta de nada aunque debería haber más mesas pequeñas porque cuando se acaban te has de sentar en mesas grandes con gente que no conoces, aunque te sirve para conocerla Por pedir algo pediría un minifrigorífico en la habitación, tampoco hace falta minibar. No veo diferencias con un cuatro estrellas, así que si vuelvo a Granada repetiré.
Estancia no hotel: Maio 2013