El único pero es que en la recepción del hotel no había nadie que hablara español y nos dieron una habitación que cuando nos fuimos tuvimos que abonar un importe por ser un paquete Bussines. Seguramente al hacer el checkin nos lo dijeron pero no lo entendimos y claro, al realizar el checkout tuvimos que pagar por ser una habitación con vistas a la plaza. Me sentí engañada, pues yo no había pedido ese paquete y ellos debieron hacerse entender de otra forma y además dármelo por escrito. Por otro lado, tengo que comentar que el personal del restaurante en el desayuno también muy desagradables y secos. El desayuno era hasta las 10:30 pero si bajabas a las 9 ya no había bollería y te decían que ya era tarde con muy malas maneras.
Estancia no hotel: Março 2018