Francamente bueno: céntrico, limpio, moderno, con sofá cómodo y buena cocina. Por poner una falta, no hay tostador. La carencia de aparcamiento se puede suplir con el público que está delante del hotel algo caro, o esperando a que quede algun sitio libre en las calles aledañas.
Estancia no hotel: Setembro 2010