Nos hemos quedado muchas veces en este hotel, siempre con buenas experiencias, esta vez no tanto. La habitación que nos dieron era pequeña y oscura, en la zona baja del hotel y la última del fondo, por un lado nos permitió estar lejos de ruidos, pero por otro nos decepcionó la bastante, apenas alumbraba la lámpara del techo, la cama era muy justa para dos personas, aunque tampoco hubiera cabido otra mayor en esa habitación. El baño era minúsculo, la puerta chocaba con el retrete, no podía abrirse del todo, y, o la dejabas apoyada en el vater o cerrada, porque a medio camino se abría sola dando un golpe en la taza, de esos que retumban. Siempre he valorado muy bien este hotel y no entendía por qué no tiene mejor puntuación. Esta vez sí lo entendí. Por otro lado la habitación estaba limpia, y dejando la puerta de la habitación atrás el hotel es todo encanto. En definitiva, una pena.
Estancia no hotel: Outubro 2018